La necesidad del consumidor de pararse y reflexionar, está dando lugar al nuevo tendencia en moda: la moda slow o slow fashion. El consumo rápido de moda o fast fashion deja paso a aquellos productos que “están bien elaborados, con materiales que no pasen de moda y que les aporten una satisfacción que vaya más allá del consumo masivo, a veces desproporcionado” señala Gema Martínez Navarro en su libro Marketing y Comunicación de Moda (ESIC Editorial).
El consumidor siente la necesidad de pararse y reflexionar
Y, aunque, hoy por hoy, el sector de la moda está dominado por la moda rápida, surge la necesidad en el consumidor de pararse y reflexionar y, cada vez está cobrando más fuerza la slow fashion, donde se valoran aspectos tangibles e intangibles, como la calidad, el buen diseño, las texturas y los acabados; o la sensación que se siente con una suave camisa de seda o un suéter de cachemira, o el tacto de un bolso de piel auténtica.
Como dice, la autora del libro: “La apreciación de estos atributos por parte del consumidor es cada vez mayor y le proporcionan un conjunto de satisfacciones que considera mayores que el simple hecho de poder comprar muchas cosas. Empieza a preferir comprar menos cosas pero mejores”.
El consumidor empieza a preferir comprar menos cosas pero mejores
Origen del movimiento Slow fashion
En la crisis económica y financiera del año 2009, aproximadamente, está el origen del movimiento slow que apuesta por el estilo de vida menos rápido, alejando al individuo del reloj, para saborear las cosas del presente y de la vida. Este movimiento ha trascendido a diferentes ámbitos como la salud, educación y trabajo y, como no, en la moda. Y, como relata el libro “Marketing y comunicación de Moda”, todo ello viene con una filosofía de base: “es preferible hacer las cosas mejor y de una forma más lenta, que hacer mucho, rápido y con menores estándares de calidad.
Definición de Slow fashion
Dicho concepto aparece relacionado con términos como moda sostenible, consumo responsable, moda ética, sostenibilidad o ecodiseño. Se trata de un nuevo enfoque y una nueva mentalidad.
Slow fashion equivale a moda sostenible, consumo responsable, moda ética, sostenibilidad o ecodiseño.
La marca Slow Love
Tres periodistas, Sara Carbonero, Isabel Jiménez y Mayra del Pilar crearon en 2015 la tienda online Slow Love, una tienda multimarca de moda, decoración y belleza con un concepto slow. Y, según sus creadoras “invita a vivir la vida, el amor y sobre todo la moda sin prisas”. En esta tienda se eligen cuidado las prendas que se venden. No son muchas pero sí elegidas”.
La marca basa su filosofía en que detrás de cada producto haya sorpresa y una historia bonita que contar.